Visita al salón de belleza...acaba bien o mal?

martes, junio 18, 2013 by

No me digas que nunca has entrado a un salón de belleza con la ilusión de obtener un nuevo y sofisticado look. Te emociona cambiar la melena que tienes ( a eso ya no se le puede llamar cabello) desde hace meses por un corte novedoso justo para tu tipo de cara. 

Te entregan muy amablemente un libro lleno de fotos con distintos looks, echas un vistazo y te enamoras perdidamente de uno. Le dices toda feliz al estilista: "Este quiero, así exacto como la foto pero quitando unos 3 centímetros más, solo 3, solo 3, solo 3, solo 3...se lo repites un par de veces más para que le quede bien grabado. Él te confirma haberte escuchado y empieza a darle forma a tu cabello (orquillado).


De un momento a otro pierdes el control de la situación y te sumerges en el mundo de las revistas. Tú solo llegas a ver por momentos a través del espejo que el estilista corta y corta y rebana. Te empuja la cabeza hacia adelante, izquierda, derecha para seguir (acabando con) cortando tu cabello. No le das importancia porque confías en su palabra, confías en que él va a cumplir lo que te prometió. 

Vuelves a la revista y de casualidad los ojos se te escapan para mirar al suelo...



10 KILOS DE CABELLO AMONTONADO EN TODO EL PISO



Entras en pánico, sientes que el universo se te cae, ruegas al mundo que se trate del cabello de otras personas pero no, esa evidencia en el suelo solo puede pertenecerte a ti, esas puntas quebradas y orquilladas son inconfundibles. Ves el resultado final, te quedan 4 pelitos.


El ambiente se llena de rencor y odio pero recuerdas lo que te enseñaron en el taller de control de ira el martes pasado así que respiras profundo y te calmas. Te repites a ti misma: "Esto crece, esto crece" y sales tranquilamente del lugar peor de lo que entraste. 

Pero siempre se aprende cosas en cada situación. Por ejemplo, ahora aprendiste que "solo 3 centímetros, solo 3, solo 3" significan para el estilista "solo 13 centímetros, solo 13, solo 13".

En mi penúltimo corte de cabello le dije al chico claramente: "SOLO LAS PUNTAS, SOOOOLO LAS PUNTAS" y cumplió pero más que nada porque lo estuve acosando con la mirada todo el rato. Y sí noté la desilución en su rostro, quedó con las ganas de mochar toda mi larga cabellera pero no se le hizo JAAAA.

De mi último corte no haré un solo comentario, fue apenas ayer y recién me estoy recuperando. 



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